Empresario, líder nato, conquistador de sueños

Detrás de cada gran empresa siempre hay un emprendedor aguerrido y líder que entrega todo de sí mismo para conquistar sus sueños. Este es el caso de Miguel Ángel Riveros, un empresario verdaderamente self made que creó y lidera tres compañías nacionales exitosas y que nunca deja de ponerse grandes metas.

Miguel Riveros

Nos cuenta que su rutina diaria comienza a las 04:30 AM “Preparo mi mate y me informo a través de los periódicos y canales digitales. Antes de iniciar nuestras jornadas laborales voy a caminar con mis hijas durante una hora, desayunamos juntos y luego cada uno a su puesto de comando”. Por lo general, las mañanas son el momento más ajetreado del día para Miguel Riveros, pues al frente del gran retail de electrodomésticos Tupi, la importadora Globo SA y Bellavista, Inmuebles y Mandatos, las tareas diarias son siempre urgentes y lo mantienen muy ocupado.

Pero su día a día no fue siempre así. Nos cuenta que desde niño es un soñador de espíritu emprendedor y muy luchador. Vino de un origen humilde y se aferró al consejo de nunca dejar sus estudios, se graduó en Contabilidad, trabajó, ahorró, se capacitó y persiguió el sueño de tener su propia empresa. Esta historia emprendedora inició con una librería, cambió el rumbo hacia un pequeño comercio de electrodomésticos -hasta hoy sigue llamándose “El Toke”- que sentó las bases para fundar Tupi, su famosa empresa líder en venta de electrodomésticos y productos para el hogar, y crear nuevos capítulos con otras empresas hacia sectores como la importación y los inmuebles.

Más de 30 años de trabajo duro

En 1987 logró abrir su primer local. En ese entonces Miguel Ángel Riveros se encargaba de todo, vender, entregar, cobrar... “Hubo un tiempo en que trabajaba 20 horas al día”, recuerda. De a poco fue ganándose la confianza de los clientes, contrató colaboradores y generó el capital necesario para comprar un local –donde hoy está Tupi Muebles-. Allí inició la historia de constante crecimiento y desarrollo de Tupi, el imperio de electrodomésticos como lo conocemos hoy.

La idea de incursionar en nuevos rubros surgió porque la empresa tenía temporadas de mucha liquidez y otras de muy poca.

Entonces, para lograr una estabilidad financiera y hacer trabajar esa liquidez, Riveros pensó en otros rubros. Acostumbrado a vivir controlando sus gastos, invirtió el excedente de dinero en un sector vinculado a su área: la importación de electrodomésticos.

El reto era que esta actividad exigía viajar, sobre todo a China para seleccionar productos. Pero viajar fuera del país no es una de sus actividades favoritas. Entonces, se valió de ingenio para averiguar con sus proveedores de dónde provenían los productos cuya calidad había comprobado y que tenían alta demanda entre sus clientes y empezó a trabajar con estas marcas a distancia. “Desde la creación de Globo SA, hace 30 años, el objetivo era importar los productos que luego vendería en Tupi, y es lo que hacemos hoy”, cuenta el empresario.

3 lecciones aprendidas

1. El aprendizaje es constante, uno nunca deja de aprender.

2. El empresario debe estar atento a los cambios y tener la capacidad de adaptarse a un mundo en constante transformación.

3. Pese al éxito, si no se cuenta con cimientos fuertes volvés a caer. Para crecer hay que formar estructuras sólidas de gestión y desarrollo en todas las áreas de la empresa.

En el caso de su empresa Bellavista, ocurrió algo similar. Comenzó prestando el dinero excedente y generando utilidades. Esto lo llevó a fundar una empresa de crédito, pero amplió la visión y también apuntó al sector inmobiliario. 

“Empecé a comprar inmuebles que estaban en oferta, los tenía un tiempo y después volvía a venderlos a buen precio. Era un negocio que se movía solo y al conformar la empresa también buscaba darle a mis hijas la oportunidad de aprender a manejar una compañía.”

Su impronta personal

El respeto irrestricto de la disciplina y la responsabilidad es la máxima principal en todas sus empresas. Para Miguel Riveros esto es innegociable y se complementa con el trabajo duro y la honestidad.

“Soy una persona trabajadora, disciplinada y muy responsable con quienes trabajo”

Empresas

TUPI SA

Retail de electrodomésticos y artículos del hogar, tecnología y otros.

Se fundó en 1996.

Su infraestructura es de primer nivel, más de 4000m2 distribuidos entre salón de exposición y depósitos.

Atiende más de 500.000 clientes y emplea a 1.000+ personas.

GLOBO SA

Importadora y representante de marcas de electrodomésticos y productos para el hogar, fundada en 1992.

Ha desarrollado la marca propia JAM y representa de forma exclusiva a Briket, Ugur, Politorno, Frider, Frare, Gelopar y MTH.

Importa y distribuye las marcas Samsung, Philips, Oster, Wahson, Bestway, Imbera y Mimet.

Su infraestructura física es de más de 10.000 m2, posee flota propia y un capital humano de primer nivel.

Bellavista de Inmuebles y Mandatos SA

Inmobiliaria y créditos inmobiliarios. Se fundó en 2008.

Ofrece una amplia variedad de créditos dirigidos a todos los segmentos. Trabaja en la adquisición de terrenos, construcción, compra y venta de viviendas. Emplea a 50+ colaboradores.

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Siendo el “Gran comandante”-como a él le gusta decir-, Riveros desarrolló una fuerte cultura que une a su gente y la guía bajo valores compartidos.

Es un líder que dirige con el ejemplo, enseña, acompaña y da valor a las personas y su trabajo. “He formado un plantel de profesionales que hasta podría arriesgarme a decir, es el mejor del país” afirma orgulloso. Parte del legado es el modelo de empresa familiar exitosa conformado con su esposa y sus hijas, donde cada miembro de la familia aprendió a amar el trabajo y a dar lo mejor de sí desde su posición de mando en las diferentes compañías.

“No soy perfecto pero soy una persona trabajadora, disciplinada y muy responsable con quienes trabajo”, afirma Riveros y destaca que una de sus mayores satisfacciones es el respeto y el reconocimiento que se ha ganado en el mundo empresarial. También la posibilidad de ser una inspiración para otras generaciones.

“Me gusta contar mi historia de superación personal y profesional para que las personas sepan que todos tienen la oportunidad de salir adelante y lograr grandes cosas en la vida”.

No existen límites insuperables cuando se posee fuerza de espíritu y determinación.

En la actualidad, Miguel Ángel Riveros sigue conservando el mismo espíritu luchador de aquel joven que no se detenía ante ninguna adversidad. Aunque la pandemia retrasó sus planes, en la empresa Bellavista reanudó el proyecto de construir un edificio residencial ubicado en la misma zona donde operan sus demás empresas. “Es nuestra primera experiencia en construcción. La idea inicial era construir dos edificios en simultáneo, no pudimos por la pandemia pero el primer edificio ya está en un 90% de ejecución y esperamos habilitarlo en abril”, detalló.

Con respecto a su empresa insignia Tupi, su gran sueño es lograr que el modelo de negocio esté a la altura de los mejores estándares mundiales. “Busco que Tupi sea un referente de modelo de negocio moderno e innovador y que nos posicione como país. Estoy trabajando durísimo para lograrlo”.

Recargar energía

Con metas que exigen mucho trabajo y concentración, el empresario destaca la importancia que tiene tomarse tiempo para descansar, practicar un deporte y estar con la familia. Riveros culmina su día de trabajo “sacando el pie del acelerador” para despejar la mente y poder lograr un buen descanso. Su escape de la rutina laboral -nos cuenta- es jugar partidos amistosos de fútbol o practicar su hobbie: la pesca y disfrutar de la pasividad del río.

“El fútbol me gusta desde niño y la pesca es como medicina para mí, es donde me desconecto de todo..."

Buenos consejos de cómo trabajar y recargar energía de Miguel Ángel Riveros.