Leading an Inspired Life - Liderando una vida inspirada

Maestro de maestros, Jim Rohn inspiró con su filosofía de vida a personalidades como Tony Robbins, Mark Victor Hansen, Brian Tracy, Jack Canfield, Chris Widener y Harv Eker. Considerado padre del desarrollo personal, Rohn tuvo la humildad de reconocer ante una audiencia masiva que no pretendía “enseñar verdades nuevas, sólo los fundamentos” porque “no hay fundamentos nuevos” ya que “la verdad no es nueva, sino vieja”. En su libro Leading an inspired Life Rohn narra su experiencia en la que pasó de ser un pobre granjero de Idaho a un empresario multimillonario en Beverly Hills. Los fundamentos que comparte en el texto quizás no sean nuevos, pero damos fe de lo prácticos y efectivos que son. Acá van tres de ellos.

1 Actuá ahora mismo
Nos encanta la forma en que Jim Rohn incentiva a la acción, convenciéndonos de que no es posible tener resultados sin movernos rápido. Nos presenta así su emblemática “Ley de la Intención Decreciente” en la cual invita a actuar tan pronto como tengamos una idea, o de lo contrario, corremos el riesgo de que nunca se materialice.

¿Te ha pasado alguna vez tener una gran idea, algo que sabés que podría generar resultados, y sin embargo nunca la ponés en práctica, para luego ver cómo alguien más se adelanta y empieza a aplicarla? Jim Rohn dice al respecto: “Para liderar cualquier área de tu vida tendrás que desarrollar la capacidad de actuar.

Actúa cuando la idea esté caliente y la emoción sea fuerte. Actúa lo antes posible, antes de que la emoción pase y la energía se atenúe. De lo contrario serás presa de la Ley de la Intención Decreciente. Cuando la idea nos impacta tenemos la intención de movernos. Pero si no traducimos esa intención en acción inmediata, la urgencia comienza a disminuir. En un mes, la pasión se enfría. Luego de un año desaparece”.

2 Buscá muchas razones que te fuercen a actuar
Para Rohn, el interés por algo nos ayuda a perseverar sólo parcialmente. Y esto es más notable cuando se presentan obstáculos. El impulso extra lo encontraremos respondiendo a preguntas como: “¿Para quién estoy trabajando además de mí?, ¿quién se beneficiará si persevero y tengo éxito?, ¿quién sufrirá si dejo de intentarlo?, ¿a quién puedo llegar y ayudar una vez que haya logrado mis objetivos?".

3 Repetí pequeñas acciones cada día
La fórmula del éxito de acuerdo a Jim Rohn es: “Pequeñas acciones repetidas todos los días”. Hacer llamadas de ventas todos los días asegura abundancia de clientes; dedicar a diario un tiempo de calidad a nuestra familia asegura el vínculo; 30 minutos de ejercicio cada día asegura una buena salud... Pequeñas acciones repetidas todos los días aseguran el éxito. ¿Querés alcanzar el éxito en algún área específica de tu vida? Entonces enumerá las pequeñas acciones que, repetidas diariamente, te entregarán los resultados buscados. Hacelo ahora mismo, no dejes que la “Intensión Decreciente” te alcance. Y encontrá motivación extra pensando en todas aquellas personas, además de vos, que se van a beneficiar con tu éxito.