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Recuperación económica y desafíos por superar

Jaime Egüez / 19/01/2022

Jaime Egüez, presidente del Club de Ejecutivos

El 2021 ha sido un año de victorias y aprendizajes que evidenciaron la resiliencia de la economía paraguaya, propulsada por agentes del sector público y privado. 

Pero también dejó entrever debilidades arraigadas en los cimientos del desarrollo económico, social y político del país. Paraguay está avanzando hacia la recuperación económica. Desde la gestión pública observamos iniciativas interesantes para apuntalar la economía y el sector privado sigue siendo un componente de gran relevancia para el desarrollo del Producto Interno Bruto (PIB). Sin embargo, el contrabando vuelve a golpear duro a nuestro sector. Hemos visto como algo positivo la recuperación del campo, del comercio y de las áreas industriales, pero es innegable la incapacidad tremenda del Gobierno de combatir el contrabando galopante que se está dando a partir de la reapertura de fronteras.

El gran pendiente para el Gobierno es el control del contrabando, sobre todo, en las tres grandes urbes Asunción-Central, Ciudad del Este y Encarnación. El contrabando y su cadena de informalidad genera un daño enorme al país atendiendo a que las personas que trabajan en el contrabando no están pagando impuestos, no aportan al seguro social y no figuran en ningún lado. Por tanto, lo único que ha hecho es robarnos la esperanza de tener un país más formal y más sostenible. Vender ilegalmente es un delito y punto, no puede haber término medio, es necesario controlar y perseguir al sector informal. 

Entre los desafíos también hemos de incluir el fortalecimiento de la institucionalidad desde la agenda parlamentaria. Hubo un gran movimiento con series de iniciativas y una reestructuración de bloques políticos que abroquelaron de acuerdo a intereses coyunturales. No vimos ejemplos claros de que el sector político esté dispuesto a colaborar en la lucha contra la corrupción. Cuando se trata de defender la institucionalidad o los procesos de anticorrupción y dejar que la Justicia haga su tarea la agenda parlamentaria tiende a moverse de un lado a otro de acuerdo a las personas en el banquillo de acusados. Esto no es una señal clara o seria de un país que busca transitar en el desarrollo de una institucionalidad que de seguridad a los inversores.

El año también nos deja aspectos positivos como la llegada de las vacunas y el inicio de la inmunización masiva. El Gobierno logró con eficacia alcanzar una de las metas básicas solicitadas desde el sector privado, que fue contener el contagio masivo y la entrada masiva de compatriotas a los servicios de terapia intensiva. Esto permitió una sensación de mayor seguridad para el retorno a las actividades rutinarias, siempre cuidando el protocolo sanitario. El sistema sanitario salió más robustecido con la pandemia y eso se puede ver con el PGN 2022. Se cuidó la continuidad de un sistema sanitario mucho más grande y fortalecido a lo que se tuvo en la pre-pandemia.

Desde el sector ejecutivo, en este 2022, apuntamos a seguir caminando por la senda de la recuperación económica y el genuino compromiso con el desarrollo integral del Paraguay.