Refinanciar es la consigna
Club de Ejecutivos / 03/09/2021
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La pandemia puso en jaque la estabilidad financiera de personas y empresas en el mundo y Paraguay no es la excepción. La imposibilidad de cumplir con el pago de créditos y la necesidad imperante de liquidez para continuar operando obligaron a recurrir a la refinanciación para hacer frente a esta coyuntura.
Cuando el mercado está lento y todavía en vías de recuperación, como demuestra estar nuestro mercado para muchos rubros y la liquidez de las empresas se ve afectada, la alternativa para las que han tomado créditos durante la pandemia es el refinanciamiento o la reestructuración de sus obligaciones financieras para disminuir la sobrecarga del pago de las cuotas de los préstamos, esperando que las condiciones económicas del mercado sean más favorables.
¿En qué consiste la refinanciación?
Refinanciar un préstamo significa reemplazarlo por uno nuevo. Es decir, el nuevo préstamo cancela el anterior y queda con mejores condiciones de tasas, tiempos de pago, u otros. La refinanciación directa sin dinero nuevo, facilita tasas de interés y pagos más bajos. Ahora si la refinanciación implica dinero nuevo, es decir que le quede al prestatario una diferencia luego de cancelar el préstamo original, no necesariamente se obtendrá la ventaja de pagos menores, pero esa diferencia incrementará la liquidez de la empresa para cubrir necesidades.
Las instituciones financieras no consideran refinanciamiento cuando el monto nuevo otorgado se aplica a un destino diferente al establecido en la operación inicial.
¿En qué consiste la reestructuración?
Este caso se da cuando el prestatario no puede cumplir con las obligaciones de la deuda. Entonces se modifican las condiciones iniciales del crédito en término de plazos, tasas de interés, sistema de amortización y otros factores. El objetivo es extender el plazo de pago y obtener un ajuste acorde a la capacidad de pago actual del prestatario. También puede tratarse de obtener períodos de gracia determinados en los que no habrá que hacer pagos. Por supuesto, todo esto es un acuerdo entre la empresa y la institución financiera que otorgó el crédito.
Las tres R de la pandemia
Renovar, Refinanciar y Reestructurar las tres formas en las que el sistema financiero nacional respondió a la pandemia desplegó facilidades inéditas respecto de los créditos y operaciones de los sectores más afectados. Los prestatarios accedieron a más plazo, períodos de gracia, facilidades en documentación y retención de la calificación crediticia.
“Nos adecuamos a las necesidades de cada sector”
“Desde TU Financiera ofrecimos a nuestros clientes todas las medidas puestas a disposición por el Banco Central del Paraguay, como la reprogramación de cuotas y préstamos con garantía del Fondo de Garantías del Paraguay (FOGAPY)” nos cuenta Mónica Fadul, presidenta de la entidad. Todos los sectores que atiende la financiera solicitaron medidas COVID, cada uno según sus necesidades. “Alrededor del 15% de nuestra cartera accedió a estas medidas”. La empresa cuenta con refinanciamiento en su porfolio fijo de servicios, adaptable a la situación de cada cliente y las normativas vigentes.“Toda refinanciación o reprogramación es buena, siempre que se utilice de manera correcta. Sea en préstamos personales o empresariales, es bueno que los clientes puedan acceder a renegociar las condiciones, plazos y gracias; pues su situación y capacidad de pago pueden cambiar en el tiempo. Al tomar un préstamo lo hacemos sobre una expectativa futura, que puede o no darse como planeamos. Entonces, es bueno tener estas herramientas para ir adecuando nuestras deudas a nuestras capacidades”, explica.
Los requisitos
Varían según el tipo de refinanciación o reestructuración que desee el cliente o al que pueda acceder y al tipo de préstamo. “Hay casos en que se deben pagar intereses o incluso parte del capital; otros en los que no hace falta hacer pagos.” Las reprogramaciones COVID tienen facilidades específicas, pueden no requerir pago alguno y formalizarse a distancia, es decir, que el cliente no necesita ir físicamente a una sucursal. En este momento TU Financiera apunta a desarrollar segmentos nuevos de negocio, productos para pequeñas y medianas empresas. “Contratamos personas y equipos expertos en estos nuevos sectores y ya estamos teniendo buenos resultados”. Fadul menciona que las expectativas de mercado son buenas, alineadas al crecimiento económico pronosticado por el BCP. “La colocación de créditos está mejor que en 2020 y quizás puedan esperarse los niveles de 2019. Es positivo y optimista ver las mejoras, pero estar igual que hace dos años, no es crecimiento, sino recuperación. Este es el caso de nuestra empresa y segmento, pero la mayoría de los sectores económicos está en situaciones similares”, finalizó.
Mónica Fadul
Presidenta Tu Financiera
“La colocación de créditos está mejor que en 2020, y quizás puedan esperarse los niveles de 2019. Es positivo y optimista, pero estar igual que hace dos años no es crecimiento, sino recuperación.”
Blanca Brítez
Gerente general Financiera Paraguayo Japonesa
“El riesgo más significativo del 2021 es la epidemia pero, a medida que avanza el plan de vacunación, el panorama va cambiando.”
“El escenario sigue cubierto de incertidumbre”
De acuerdo a la óptica de Blanca Brítez, “El escenario que atravesamos sigue cubierto de incertidumbre que impacta en el movimiento normal de la economía”. Desde la perspectiva macroeconómica, la caída de la económica del país en términos del Producto Interno Bruto, fue una de las más bajas de la región y las proyecciones económicas son alentadoras para lo que resta del año. Condiciones que, en cierta medida, tienen que ver con la reacción que tuvo el año pasado el sector financiero que jugó un rol importante con medidas que ayudaron a mitigar el impacto del 2020. Enfatizó que el riesgo más significativo del 2021 es la epidemia pero que a medida que avanza el plan de vacunación el panorama va cambiando. También opina que será clave que los principales motores de la economía local estén activos (agricultura y ganadería), y que el gasto público e inversiones sigan dinamizando la economía con su efecto multiplicador. El sector industrial de la cadena agropecuaria y el de la construcción deberán mantenerse dinámicos estimulando la expectativa favorable para sector financiero/crediticio para que demos pasos firmes hacia la transformación económica que garantice la recuperación, redondeó.
MIPYMES
Uno de los sectores más golpeados fue el de los emprendedores, a un año del inicio de la pandemia, una encuesta de Asociación de Emprendedores de Paraguay y Nauta reveló que 48% de los emprendedores encuestados accedió a créditos para cubrir el pago a proveedores, salarios y compra de insumos. 8 de cada 10 emprendedores requirieron refinanciación de sus deudas para no entrar en morosidad. La puesta en marcha de la campaña nacional de vacunación y el comportamiento positivo de los agentes económicos revivieron la esperanza de una recuperación económica más dinámica, acompañada de la vuelta a la normalidad que podría revitalizar el consumo. En este contexto la refinanciación sigue siendo la consigna para encontrar alivio financiero y seguir invirtiendo en los negocios.
Una pyme en crecimiento debe mantener su deuda controlada para reducir el riesgo de incumplimiento con acreedores, proveedores y clientes.
¿Cuándo conviene solicitar una refinanciación o reestructuración del crédito?
Cuando se necesita reducir los pagos mensuales Cuando al reducir el monto de pago, el excedente puede utilizarse como capital operativo.
Cuando se precisa extender o acortar el plazo de pago
¿Cuándo no conviene?
Cuando la reestructuración podría afectar negativamente el flujo financiero cayendo en una deuda cíclica. Las soluciones de deudas a corto plazo para operaciones comerciales a largo plazo no son viables. Deben sopesarse los beneficios y las desventajas para saber si es una decisión favorable para la salud financiera y la vitalidad continua de la empresa.
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