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Transformación estratégica hacia la economía del futuro

Club de Ejecutivos / 21/08/2023

Estamos viviendo una época de cambio sin precedentes. La tecnología avanza a pasos agigantados y los modelos económicos tradicionales están siendo desafiados. Octavio Martínez Argüello, profesor de estrategia competitiva y corporativa en INCAE Business School, abordó los retos que enfrentarán nuestras empresas en una charla sobre transformación estratégica.

Octavio Martínez Argüello

La economía del futuro se presenta como un terreno fértil para quienes se anticipen y se adapten a los cambios. La transformación estratégica puede ser la clave para aprovechar las oportunidades que existen en el nuevo escenario económico. “Vamos a empezar hablando de la coyuntura que vivimos en los países latinoamericanos hoy en día – comenzó diciendo Octavio Martínez Argüello- vemos una mayor confrontación política y social entre la sociedad, el sector privado y los diferentes grupos que conviven en cada país. Está aumentando la frecuencia en las tensiones políticas y sociales que vemos en nuestros países.” Martínez Argüello, afirma que estas tensiones son producto, principalmente, de los años de pandemia que afectaron la calidad de vida de los ciudadanos por las medidas sanitarias que se tomaron, la de pérdida de empleos, la reducción de jornadas laborales etc., una serie de consecuencias que desgastaron la calidad de vida de las personas. Un segundo elemento coyuntural y estructural, es el debilitamiento de las instituciones y sistemas democráticos en los países latinoamericanos en general. ¿Qué es lo preocupante de esto? Que en el futuro probablemente los gobiernos tendrán un mayor rol en términos de creación y fortalecimiento de regulaciones frente a los retos importantes que enfrentamos. 

Un tercer elemento estructural es la crisis humanitaria generada por la invasión de Rusia a Ucrania. Esta es la crisis humanitaria más grande desde la Segunda Guerra Mundial en Europa que ha desplazado a 16 millones de personas, la mitad ha tenido que migrar desde Ucrania a países vecinos y la otra mitad, ha migrado desde el este al oeste del país. También hay que agregar a todo esto la tensión geopolítica entre China y los EE.UU. El distanciamiento entre las dos grandes potencias económicas del mundo ha ido aumentando en un contexto global de desaceleración económica y conflictos que afectan las relaciones diplomáticas, dañando una gran cantidad de negocios y perjudicando el movimiento de contenedores.La combinación de todos estos eventos ha producido la ruptura de cadenas de valor y de suministro en el mundo generando un efecto inflacionario mundial. En este proceso inflacionario, Paraguay tal vez tenga un comportamiento más positivo que el contexto internacional. Sin embargo la expectativa internacional es que el año 2023 va a cerrar con 5 puntos porcentuales de inflación, bien marcados en Europa y en otros mercados desarrollados. Muchos economistas piensan que vamos a entrar en una etapa de unos 2 a 3 años en los que la inflación se mantendrá a niveles relativamente altos, no tanto como el año pasado o ahora, pero no serán los niveles bajos históricos a los que estábamos acostumbrados. 

Oportunidades para Latinoamérica

Esta crisis mundial está generando una oportunidad de crecimiento para la región con el “nearshoring”, derivado del “offshoring” cuando una empresa para reducir costos, transfiere sus procesos de negocio y fabricación a terceros ubicados en destinos lejanos. El nearshoring es la prestación de esos mismos servicios o procesos pero desde países cercanos al país que está contratando. La oportunidad para países latinoamericanos es el sistema de nearshoring, que reconfigura las cadenas de suministro global y repiensa el modelo de China como la fábrica del mundo. Nuestra región podría aportar a la economía global y al combate contra la inflación con mayor participación en las cadenas de suministro de forma sostenible y equitativa. Esto abre oportunidades para los países latinoamericanos si las pudiéramos aprovechar. Hay un estudio reciente del Banco Interamericano de Desarrollo BID que cuantifica por sectores donde podríamos generar quick wins” pues existen capacidades productivas para escalar y aprovechar la oportunidad que nos abre esta reconfiguración de las cadenas globales de suministro en corto y mediano plazo. Hay posibilidades reales de atraer inversión a los países latinoamericanos con la maquila (por ejemplo). Muchas empresas quieren comprar sus insumos desde la región y no desde China.

Pero para esto debemos prepararnos

Algo fundamental – resaltó Martínez - es capacitar a nuestra fuerza de trabajo para una economía digital, sobre todo en nuestros países donde la mayor parte de la fuerza laboral está en los segmentos de habilidades medias o bajas, de tareas repetitivas y manuales. Estamos más expuestos al impacto de la tecnología. El reto es ¿cómo preparar a nuestro talento para la economía digital, potenciando su efectividad y productividad con la tecnología y no ser víctimas de este proceso. En cuanto a estrategia competitiva la mayoría de nuestras empresas todavía no incluye entre sus objetivos centrales la transformación digital. Si esto no es explícito será difícil avanzar sustantivamente en ello. Por ejemplo, toda compañía recopila datos pero usa menos del 50% de los que recopila y muy pocas incorporan capacidades analíticas. Hoy la nueva tecnología nos habilita a procesar esta información en reportería, visualización e indicadores que ayudan a tomar mejores decisiones. 

Convenio con INCAE 

Esta ha sido la primera de muchas charlas organizadas para socios, ya que el Club de Ejecutivos del Paraguay ha firmado un convenio con la escuela de negocios INCAE dedicada a proporcionar a los empresarios las habilidades y las herramientas necesarias para enfrentar los desafíos de un mundo en constante cambio. Profesores y expertos en diferentes materias ayudarán a los socios a alcanzar sus metas y a llevar sus negocios al siguiente nivel.

Según BID, la ganancia potencial del nearshoring para América Latina y Caribe sería de US$78.000 millones en exportación de bienes y servicios, industria automotríz, textil, farmacéutica, energía renovable y otras.