Walter Bastos

Mabel Álvarez / 09/10/2018

El mercado penaliza las malas prácticas. Una mala gestión sistemática termina, más pronto que tarde, volviéndose en contra de los intereses de la empresa. Pero hay errores que son más graves que otros, y estos, según Walter Bastos, presidente de Dale Carnegie Paraguay y socio del Club de Ejecutivos, son los estratégicos. “Los errores operativos –comenta el consultor experto- pueden lesionar pero no generar daños irreparables. Sin embargo, para los errores estratégicos en muchos casos no hay una segunda oportunidad”.

Jim Collins estaría de acuerdo con nosotros en la necesidad de identificar estos errores cuanto antes, pues como cita en su libro Empresas que caen: “El declive de una empresa es como una enfermedad: más difícil de detectar pero más fácil de curar en las primeras etapas”.

Basándose en su experiencia realizando la planificación estratégica de más de 200 grupos empresariales y habiendo entrenado unas 30.000 personas, Walter Bastos, quien es una institución en nuestro país, ha tenido la amabilidad de desarrollar en exclusiva para Ejecutivos, los 10 errores estratégicos más comunes que cometen las empresas paraguayas, que de no subsanarse a tiempo, podrían llevarlas a situaciones críticas.

Foco en lo económico y no en lo financiero:

Siempre es bueno entender que un buen resultado económico no es sinónimo de que se gana dinero. Conozco muchas empresas en las que sus cuadros de resultados económicos son excelentes, pero financieramente están en grave peligro. Una empresa es buena si es buena para el accionista. Hay que generar flujo de caja libre. Esto implica elaborar un plan financiero en el que se logre lucro líquido.


Foco en la empresa y no en el mercado:

En 30 años de gestión he constatado (como regla) que las empresas paraguayas miran hacia su interior y no hacia las oportunidades del mercado. Cuando establecen su plan de negocio y sus metas para el siguiente año lo hacen en referencia a lo alcanzado el año anterior. La excepción son las empresas que miran los números del mercado y buscan conquistar un porcentaje del mismo. El punto de partida para CRECER son los números del mercado. Las metas son diferentes y el desafío es real.


Foco en el producto y no en el cliente:

Hago la dirección estratégica en BMW. Si nuestra empresa comercializara automóviles sería como vender un commodity. No vendemos automóviles, vendemos membresía, placer. Esto genera una gran oportunidad de rentabilizar al cliente. Hay un libro muy bueno de título: “Capitalismo sin capital: El ascenso de la economía de los intangibles“. Sería bueno adentrarse en la filosofía de los autores Haskel y Westlake, de manera a revertir esa rara obsesión del empresario paraguayo de ser dueño de lo tangible. Estamos en el siglo XXI. El patrimonio más importante es el intangible.


Ausencia de inteligencia asociativa:

Salvo algunas excepciones, como el citado caso de MUV, “el Uber" de Paraguay, no nos dimos por notificados de la vigencia de las plataformas de economía colaborativa. Esa psicología de ser dueño del todo nos lleva a un gran retroceso. La intermediación está desapareciendo.


Ausencia de sistemas eficientes:

Hay una máxima que reza: “No hay error de personas, hay error de sistemas”. Este es un gran desafío para nuestra cultura de gestión. El éxito en la productividad radica en que la operación esté basada en el sistema. El Ministerio de Hacienda de Paraguay es un excelente ejemplo del cambio radical que se produjo en su gestión a partir del cambio de sistema. En el ámbito de las empresas privadas, los sistemas de remuneración variable han aumentado la productividad de manera radical.


Concentración de poder: 

Esto es un gran error estratégico. Existe poca cultura de la delegación. Dividir esfuerzos para multiplicar resultados es la base de la generación de riqueza. No hay ninguna posibilidad de aumentar la productividad en ausencia de una estructura de delegación. Saber Hacer - Hacer es la clave para la implementación.


Foco en atender la demanda y no generar demanda: 

Volviendo al ejemplo de Uber, hace poco hubo en Asunción una movilización de taxistas ante la amenaza de la presencia de Uber en Paraguay, -la aplicación que genera un encuentro entre oferentes y demandantes de transporte de personas-. Si entrás al Apple Store y bajás la aplicación MUV podríamos decir que “Uber” ya llegó a Paraguay. La inteligencia de negocio debe generar demanda. Hay que investigar las necesidades latentes y sobre esto generar demanda. Ver los números de la oportunidad es la base de un crecimiento productivo y sustentable.


Ausencia de medición: 

Lo que no se puede medir no se puede controlar y lo que no se puede controlar no se puede gerenciar. En la era digital la medición ya no es un imposible. Se puede y se debe hacer en tiempo real. La ventaja competitiva que otorga la medición en tiempo real genera una capacidad de respuesta de altísima productividad.


Ausencia de jugadores clave: 

Jack Welch sostiene que contratar jugadores claves es la base del éxito. Además de la competencia técnica, me encanta el esquema de las 4 E que él mismo plantea. 1ra E: Energía Positiva. Las personas con energía positiva aman la vida.2da E: Energizar a Otros. Sostiene Welch que dar energía a otros no consiste solo en soltar arengas marciales. Implica conocer profundamente el negocio y tener notables dotes de persuasión. 3ra E: Entereza. Tener el valor para tomar decisiones complejas en su momento. 4ta E: Ejecutar. Tener la capacidad de hacer el trabajo.


Sálvese quien pueda: 

"El futuro del trabajo en la era de la automatización" es el libro de Andrés Oppenheimer lanzado el 24 de agosto de 2018. Es una suerte de recordatorio que estamos en la era digital. Para algunos una amenaza, para otros una oportunidad. Hay un cambio radical en los mecanismos de eficiencia a las empresas desde la economía digital. Yuval Harari en su libro “21 lecciones para el siglo XXI” (luego de sus magníficas obras Sapiens, Homo Deus) dice: "La humanidad está perdiendo la fe en el relato liberal que ha dominado la política global en las últimas décadas, exactamente cuando la fusión de la biotecnología y la infotecnología nos enfrenta a los mayores desafíos que la humanidad ha conocido”.