Por Gloria Ortega, socia del Club de Ejecutivos
En el tiempo de la hipermodernidad, cada día es más frecuente escuchar que las empresas deciden adquirir tecnologías en la nube. También, incorporar a sus desarrollos tecnológicos piezas tecnológicas que no son parte del desarrollo, pero que le agregan valor como, por ejemplo, la validación de identidad en el mundo digital que hoy ofrecen plataformas como Amazon y otras, y que forman parte de procesos digitales de las empresas.
Otro ejemplo es la conversión de imágenes a texto, que se realiza enviando la imagen a plataformas en la nube. Estas plataformas devuelven el texto mediante tecnologías de inteligencia artificial o de aprendizaje de máquina (Machine learning). En otras palabras, un desarrollo que se realiza a nivel local puede consumir servicios en la nube, y, en su conjunto, generar procesos digitales.
Un último ejemplo, ya muy habitual, es la capacidad de los sistemas de notificar a los usuarios sobre transacciones, oportunidades, o mensajes informativos relevantes. Estas notificaciones generalmente pueden llegar a los usuarios por mail, mensaje de texto, WhatsApp u otros.
A la hora de evaluar los costos de las plataformas olvidamos, muchas veces, los precios ocultos relacionados con estos servicios en la nube, así, como su soporte, mantenimiento, costos de realizar pagos al exterior, etc. Asimismo, olvidamos a veces incorporar los costos de consultores, especialistas o tiempo que los equipos internos deben dedicar para lograr estas integraciones.
De esta manera terminamos tomando decisiones tecnológicas, de implementación de nuevos sistemas de información, dónde nos sorprenden facturas no esperadas, la mayoría de las ocasiones totalmente fuera del presupuesto, y que llegan demasiado tarde.
Por eso es clave comprender el concepto del costo total de la propiedad. El que consiste en el análisis exhaustivo de todos los costos, sean estos de licencias, soporte y mantenimiento, redes de acceso, incluso los costos recurrentes por servicios, como las validaciones de identidad, conversion de imagen a texto, envío de mensajes y otros.
Es importante tener en cuenta que a esto deberán sumarse los costos de los recursos internos o consultores contratados, tanto para el desarrollo de las soluciones como para el soporte y mantenimiento de las mismas. Como resultado del análisis del costo total, saldrá una inversión inicial y un costo estimado anual para operar la solución.
A propósito, existen formularios, incluso gratuitos, que pueden ayudar a completar la lista total de costos posibles. Tener estos números antes de tomar decisiones es clave para no brindar un servicio que luego sale demasiado caro.
Por lo tanto, la utilización de las tecnologías de los sistemas informáticos es hoy la tendencia que se impone para la eficiencia de las empresas. Y también para agilizar y mejorar el servicio a los usuarios. En el Paraguay debemos comprender que el mundo avanza hacia la digitalización. Y que nosotros no podemos quedarnos atrás, tanto para las operaciones internas como internacionales. Para tal efecto, necesario es conocer el costo total de las tecnologías.
Últimas Opiniones
-
¿A quién va dirigida la experiencia que estás diseñando?
Josefina Bauer
13-05-24 -
¿A quién va dirigida la experiencia que estás diseñando?
Josefina Bauer
06-05-24 -
Centros de Contacto: Bots vs Personas
Raquel Dentice
06-05-24 -
El liderazgo inclusivo
Mirian Rojas
15-04-24 -
Importancia de la intercomunicación
Josefina Bauer
08-04-24 -
El nuevo consumidor
Raquel Dentice
01-04-24 -
Voto económico
Mirian Rojas
05-12-22 -
La gobernanza y su proceso
Jaime Zúñiga
01-04-24 -
Un SOS para la comunidad educativa
Katy Guillen
11-03-24 -
Las dos caras de la moneda en el mundo empresarial
Josefina Bauer
04-03-24 -
Marketing + IA
Pablo Kalbermatten
03-03-24 -
Efecto Tango
Luigi Picollo
01-04-24 -
Hacia una Experiencia Omnicanal
Raquel Dentice
18-02-24 -
Las lecciones que deja Ochsi
Katy Guillen
12-02-24 -
Tendencias en Atención al Cliente para 2024
Raquel Dentice
29-01-24