Fase: Sobrevivencia 2.0


Publicado en: Última Hora
Publicado el: 04-08-20
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Por Luigi Picollo, Vicepresidente del Club de Ejecutivos

El Banco Central del Paraguay afirmó que nuestro país entrará en la mayor recesión económica de sus últimos 70 años. Una probabilidad tan dura solamente lo puede decir un Banco Central “independiente”. Según el FMI nuestra pérdida económica estimada para el 2019-2020 estará en US$ 5.803.000.000. En la calle, para la mayoría de las empresas y personas, la situación económica no para de empeorar. En un país donde casi el 50% de su economía es informal, los números formales son solo de la mitad, valga la redundancia. Esta es la realidad, al margen de las promesas políticas.

El desafío de sobrevivencia pasa a un extremo nivel de dificultad. Como en los videojuegos, donde cada vez aparecen más villanos, se nos van terminado las vidas, y nos sentimos cada vez más solos. Nunca la alta gerencia trabajó tanto para conseguir tan poco. En esta fase debemos pisar tierra y ser bien concretos en nuestras acciones y decisiones. El largo plazo solo existirá si pasamos el corto plazo. Soñadores a un lado, poesía corporativa en “mute”, pues esto se va a poner más feo antes que mejore. Van algunas ideas de acciones para intentar subsistir.

Evaluar los negocios dejando de lado el idealismo y la pasión, para realmente definir cuáles son las actividades comerciales en que tenemos oportunidad de ganar, somos o podemos ser líderes y contamos con la mayor lealtad de los clientes. Concentremonos en eso, apostando todas las fichas. El resto de los emprendimientos que aún están en fase inicial, que han sido flujo de caja negativos antes del Covid, que prometen, pero costarán todavía más, la decisión debe ser vender, suspender operaciones indefinidamente o cerrar. La repetida receta de “innovar” requiere tiempo de diseño, dinero para financiarlo, y clientes descubridores propensos a comprarlos, tres condiciones con la que ya no contamos en tiempos de pandemia.

El área financiera/contable debe producir información económica para decisiones futuras. La contabilidad mira el pasado, y la verdad es que los tenedores de libros ya fueron substituidos por softwares. El valor de las personas en esa área está en poder proyectar el flujo de caja futuro con criterio, ingresos y egresos reales por línea de negocio. Lo que mata es la falta de caja a corto plazo. Asombra la poca capacidad de la mayoría de las empresas para realmente proyectar a futuro sus escenarios de caja. Hasta un tonto puede explicar el pasado, pero se necesita de una persona verdaderamente capaz para modelar el futuro.

Abrir conversaciones realistas y sin filtros con todos los colaboradores a todos los niveles. El líder siempre está en el puente de comando mirando afuera del barco,  por lo que observa la realidad con más detalle de quienes están dentro de las paredes del barco con pequeñas ventanas. Ahora toca compartir el duro escenario con quienes aún están creyendo que los problemas del Covid se resolverán pronto. El ser humano es muy hábil en negar la realidad cuando le produce ansiedad o dolor, esa es la base de todas las neurosis. El objetivo es que surjan las ideas de bajar costos, ser más eficientes, hacer más con menos, servir necesidades desatendidas de los clientes, saber lo que realmente se necesita comprar.

Al tacho con las descripciones de cargo. Ahora todos tienen que hacer de todo. La persona capaz identifica posibilidades de mejora en todas las esquinas y busca trabajo sin que se le ordene. La competencia interna de tener razón debe dar lugar a la colaboración en pro de la sobrevivencia de todos. Sorprende la cantidad de estrellitas que no saben trabajar en equipo. Hoy quedémonos con los más competentes que tengan la mejor actitud.

Toda esperanza de que esto duraría poco se esfuma. El mérito está en sobrevivir, en mantener la moral de la tropa desde la realidad, en dedicar nuestra limitada energía, tiempo, caja, líneas de crédito y salud personal para re-enfocar fijamente en lo que ya veníamos haciendo bien y somos capaces de cumplir.



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